Desde su reinstauración la Hermandad de Begoña subraya el fomento de la devoción a la Virgen de Begoña como uno de sus principales cometidos. Verdaderamente si una devoción no la siembras día a día, con el tiempo se duerme y por último muere.
Desde su reinstauración la Hermandad de Begoña subraya el fomento de la devoción a la Virgen de Begoña como uno de sus principales cometidos. Verdaderamente si una devoción no la siembras día a día, con el tiempo se duerme y por último muere.
Con objeto de que esto no ocurra con la devoción a nuestra Patrona, la Hermandad decidió acudir a cuantos lugares se le rinde culto, y hacerlo con la mayor fuerza posible.
En cumplimiento de su objetivo de fomentar la devoción a la Virgen de Begoña, la Hermandad ha organizado tres grandes peregrinaciones.
La primera de ellas fue al santuario de la Virgen de Torreciudad, en Huesca, en cuya galería de imágenes marianas faltaba por entronizar a la Virgen de Begoña. Con este fin se bendijo en la Basílica de Begoña una talla de nuestra Patrona el 19 de Mayo de 2000, ante una multitud de fieles, de donde partió inmediatamente en peregrinación.
Al día siguiente, se hizo escala en Zaragoza para realizar una ofrenda floral en la Parroquia de Nuestra Señora de Begoña de la capital aragonesa y tener un encuentro con su Comunidad Parroquial y con una representación de la Cofradía de la Piedad y el Santo Sepulcro.
El 21 de Mayo, ya en Torreciudad, se dedicó toda la jornada en honor a la Virgen de Begoña. La talla de la Virgen llegó en procesión desde el crucero, acompañada por la Banda de Cornetas y Tambores de la Hermandad, y fue recibida entre el sonido de campanas por el Rector del Santuario y conducida al templo. Allí se celebró una Misa Solemne, acompañada por el Orfeón San Antón, al final de la cual se bailó un aurresku de honor interpretado al txistu por Mikel Bilbao, txistulari de la Banda Municipal de Bilbao.
En representación de todos los romeros, Telmo Zarra (q.e.p.d.), mítico jugador del Athletic y Hermano Mayor Honorario de la Cofradía, realizó las ofrendas. Por la tarde, los más de dos mil peregrinos participaron en el rezo del Santo Rosario mientras la talla de la Virgen procesionaba por los alrededores del santuario.
La segunda peregrinación, que tuvo lugar los días 28, 29 y 30 de Abril de 2001, tenía como destino la localidad portuguesa de Vieira do Minho, en la Comarca de Braga. El motivo era la celebración del II Centenario de la erección en ese lugar de una Capilla consagrada en honor de la Virgen de Begoña por un grupo de vizcaínos que emigraron a Portugal y, como en la precedente, se llevó como regalo una réplica de la Virgen de Begoña.
El acto central, una Eucaristía celebrada por el Obispo Primado de Braga en la Capelha de Begonha, tuvo lugar el día 29 de Abril y contó con la presencia de las máximas autoridades de la provincia portuguesa. La procesión y los actos al aire libre hubieron de ser suspendidos por la intensa lluvia. Sin embargo sí tuvo lugar, después del Almuerzo de Hermandad, el Concierto de la Coral San Antonio de Iralabarri, que había acompañado la ceremonia.
En los actos participaron asimismo la Banda de Cornetas y Tambores de la Hermandad y Mikel Bilbao, actualmente Hermano Mayor Honorario de la Hermandad. La jornada se completó con diversas recepciones en la Diputación y en el Ayuntamiento en las que se intercambiaron diversos recuerdos que se conservan en la sede de la Hermandad.
La tercera peregrinación tuvo lugar el 13 de Mayo de 2007. Ese día tuvo lugar un gran encuentro de los devotos de Ntra. Sra. de Begoña en Madrid, concretamente en la Parroquia dedicada a la Virgen de Begoña (Marcos de Orueta, s/n; 28034 MADRID. Barrio de Begoña. Tfno.: 91 358 28 56).
Ciertamente, la Peregrinación se propuso para el pasado año 2006, pero dificultades técnicas impidieron que esta se desarrollara.
Aunque los actos en honor de la Virgen de Begoña se celebraron el 13 de Mayo, una pequeña expedición llegó el día anterior. Así, los peregrinos, después de una parada en Aranda de Duero, se dirigieron a la calle Jovellanos de Madrid. Allí está la sede de la Congregación de Oriundos de las Provincias Vascongadas, Institución fundada para asistir a los vascos que acudían a trabajar a Madrid.
La Capilla de la Congregación está presidida por una imagen de Nuestra Señora de Begoña, vestida con manto (en talla). En el templo se celebró la Eucaristía. Fue un acto familiar al que acudió una representación de la Euskal Etxea de Madrid y de la propia Congregación.
Al día siguiente, una procesión con los estandartes de la Virgen de Begoña acompañados por los txistularis y los fieles, dieron paso a la Celebración de la Eucaristía, presidida por el Asesor Religioso de la Hermandad de Begoña.
La iglesia, abarrotada, respiró un auténtico ambiente de hermandad. Allí se reunieron feligreses del barrio, pero también estuvieron miembros de las dos cofradías de la Almudena y numerosos vizcaínos que acudieron a la cita desde todos los puntos de la capital.
A continuación, todo recordó a un día de Romería en Begoña: allí estaban los tradicionales pañuelos morados, las chocolatinas y los dibujos de los niños.
En lo festivo, el grupo Erreka Ortu Euskal Dantza Taldea interpretó y explicó un completísimo alarde de Danzas. Asimismo, hubo una Exhibición de Deporte Rural.
Después de una comida de Hermandad, los actos continuaron por la tarde con el encuentro en la Basílica y Catedral de la Almudena.
Allí esperaban a los peregrinos una amplísima representación de la Corte de Honor de Santa Maria la Real de la Almudena y de la Real Esclavitud y Santo Rosario de Santa Maria la Real de la Almudena.
Se rezó la Sabatina y se cantaron los respectivos himnos a las Patronas de Vizcaya y de Madrid. Después se hizo una ofrenda a la Almudena con los dibujos que habían realizado los niños por la mañana como Regalo a la Virgen.